Madrid, 3 de febrero de 2015 (IVICON).- Una vez más la Vida Consagrada de Madrid ha dado gracias por el regalo de la vocación en la Jornada anual convocada por la Iglesia para tal fin. Con este motivo el día 2 de febrero, a las 7 de la tarde, la catedral de la Almudena de Madrid se abarrotó de religiosas y religiosos para participar en la eucaristía presidida por el Arzobispo de Madrid, D. Carlos Osoro, y concelebrada por los Presidentes de Confer Nacional, Centro y Diocesana de Madrid, el Vicario de Vida Consagrada, todos los Vicarios Episcopales de la Diócesis y gran cantidad de Superiores Provinciales y religiosos residentes en Madrid.
En un ambiente de familia precioso D. Carlos volvió a dar gracias por la Vida Consagrada, por cada uno de los religiosos presentes en la diócesis, “amigos fuertes de Dios”, y por las obras que llevamos entre manos en lugares de periferia y que sabemos hacer tan bien, dijo el Arzobispo. Manifestó, una vez más, su deseo de contar con todos para seguir dando vida a esta gran diócesis.
Después de la homilía los religiosos renovaron su consagración en el seguimiento de Cristo pobre, casto y obediente, y al servicio de los más abandonados.
Al terminar la celebración D. Carlos saludó personalmente a la mayor parte de los religiosos presentes.
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